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Por Redacción - 6 Abril 2016
En 2013, la OAMI, a través del Observatorio Europeo de las Vulneraciones de los Derechos de Propiedad Intelectual, encargó un estudio denominado "Los ciudadanos europeos y la propiedad intelectual: percepción, concienciación y conducta". Según uno de sus principales resultados, las generaciones más jóvenes ponen en cuestión la PI de un modo significativamente superior al de otros grupos de edad.
Para comprender mejor las razones que subyacen a tal realidad, la OAMI encargó este estudio de seguimiento dirigido a los jóvenes de edades comprendidas entre 15 y 24 años en los 28 Estados miembros (EM). Su principal objetivo es recabar información sobre la manera en que se comportan los jóvenes en Internet y, en particular, determinar cuáles son para ellos los principales impulsores y barreras respecto a la adquisición de contenidos y bienes físicos en línea que se ofrecen legal e ilegalmente, así como evaluar lo que se puede hacer para mejorar la situación.
La primera fase del estudio consistió en una investigación cualitativa en cada uno de los 28 EM. A tal efecto, se recurrió a sesiones de grupos temáticos de 120 minutos de duración, en las que participaron 8 jóvenes europeos por grupo. La segunda fase fue la parte cuantita- tiva del estudio, que consistió en una encuesta en línea utilizando la metodología CAWI1, sobre la base de los grupos de expertos de GfK en los 28 EM. El cuestionario para la en- cuesta en línea se diseñó con arreglo a los resultados de los grupos temáticos cualitativos, y se utilizó para obtener datos cuantificables, que se añadieron a las reflexiones recabadas durante la parte cualitativa del estudio. Los subgrupos considerados por defecto atañen a las características sociodemográficas de género, grupo de edad, nivel educativo (estudios finalizados y en curso), situación de empleo, e ingresos como estudiante.
La música es el contenido en línea al que se accede con mayor frecuencia en internet
Una mayoría de consultados accedieron a contenidos de música, películas y series, y juegos, y los utilizaron, en los últimos doce meses, mientras que a los periódicos, revistas y libros electrónicos accede una proporción de usuarios ligeramente menor.
En lo que se refiere a la frecuencia de uso, se accedió a contenidos de música un promedio de 204 días por año. El tipo de contenidos que menos utilizaron los jóvenes fueron los periódicos y revistas electrónicos; en concreto, 46 días al año.
La transmisión en directo o « streaming » es más popular que las descargas
En los grupos temáticos se determinó que, para los jóvenes, tiene menos sentido des- cargar una canción para almacenarla en el disco duro de su teléfono móvil, tableta, portátil u otro tipo de dispositivo. Lo mismo ocurre en el caso de los eventos deportivos, percibidos como acontecimientos que se dan solo una vez y deben experimentarse en directo. En este sentido, la música, las películas, las series y los eventos deportivos, en la mayoría de las ocasiones, se reproducen y no se descargan, lo que no ocurre en el caso de los libros electrónicos. Estas preferencias entre el streaming o la descarga de contenidos digitales se vieron confirmadas por los resultados de la encuesta en línea.
Los adolescentes(de 15 a 17 años de edad) consumen mediante transmisión directa o streaming diversos tipos de contenidos en una proporción superior a la media: programas de te- levisión y acontecimientos deportivos, periódicos y revistas electrónicos, películas y series, libros electrónicos y contenidos educativos. Los adultos jóvenes (de 22 a 24 años de edad) descargan programas de televisión y eventos deportivos, películas y series, libros electróni- cos y contenidos educativos en una proporción claramente por encima de la media.
La calidad, el precio y la seguridad son los aspectos más importantes al acceder a contenidos en línea
Cuando se pregunta a los jóvenes qué consideran importante cuando consumen en directo o descargan contenidos en línea, destacan tres cuestiones: casi dos tercios de los consultados señalan que un contenido en Internet de buena calidad es uno de los aspectos más importantes. Para una proporción ligeramente inferior de los encuestados, que los contenidos en línea sean baratos o gratuitos es muy relevante. La seguridad del sitio web o la fuente ocupa el tercer lugar en cuanto a importancia. Los resultados de la encuesta ponen de relieve que, para casi un tercio (29%) de los jóvenes, la legalidad de la fuente es igualmente importante al acceder a contenidos digitales. En el informe se constatan variaciones entre países.
El 25% de los jóvenes utilizaron fuentes ilícitas para acceder a contenidos en los 12 últimos meses
Uno de cada cuatro jóvenes utiliza fuentes ilícitas para acceder a diversos contenidos. Aunque existe claramente una proporción de jóvenes que recurre a fuentes ilegales, la gran mayoría (81%) de la muestra afirmó que también utiliza fuentes lícitas para acceder a los contenidos en Internet. Esto significa que únicamente una minoría se sirve exclusivamente de fuentes ilícitas para el acceso a tales contenidos. En este grupo minoritario, existe una mayor representación de varones (22%, frente al 16% de mujeres), así como de encuestados que perciben ingresos (20%, frente al 15% sin ingresos). Los estudiantes con ingresos muestran una tasa superior de uso intencionado de fuentes ilícitas: 70%, frente al 63% de estudiantes sin ingresos. El mayor nivel de uso intencionado se observa entre los consultados que ya han completado sus estudios.
Los que no utilizaron intencionadamente fuentes ilícitas, y los que las utilizaron por accidente (en su mayoría, del grupo más joven), refirieron los siguientes motivos para abstenerse de cometer infracciones: miedo a los riesgos derivados de virus o programas espías (spyware) (53%), escasa confianza en las fuentes ilícitas (45%), y no desear co- meter ilegalidades (43%). La mayoría de los jóvenes que ignoran si utilizaron fuentes lícitas o ilícitas señalaron que tal circunstancia deriva de su incapacidad para determinar si la fuente en cuestión es legal o no.
Las películas y las series constituyen los contenidos a los que se accede con mayor frecuencia a través de fuentes ilegales
La música es el contenido digital más popular al que acceden los jóvenes, ya que casi todos ellos lo reciben directamente (por streaming) o lo descargan (97%). Sin embargo, solo una proporción ligeramente superior a la mitad (56%) de los jóvenes que utilizan fuentes ilícitas se sirven de estas para acceder a contenidos musicales. Las películas y series representan el segundo tipo de contenido al que más se accede (95%), si bien ocupan la primera posición (85%) entre los contenidos a los que se accede intencionadamente a través de fuentes ilegales.
El precio, la restricción al uso personal y la disponibilidad constituyen los tres factores principales que impulsan el uso de fuentes ilícitas
El precio es el factor más relevante para las mujeres (73%, frente al 62% de los varo- nes), los estudiantes sin ingresos (71%, frente al 67% de los estudiantes con ingresos), los encuestados desempleados (67%, frente al 56% de los empleados) y, por último, para los estudiantes de enseñanza superior (73%, frente al 62% de los que cursan estudios de menor nivel). El precio es el factor más importante en todos los países que impulsa el uso de fuentes ilícitas de contenidos en línea para una mayoría de los jóvenes europeos. El segundo motivo para recurrir a fuentes ilícitas al que alude el 38% de los consultados es que estos no ven nada malo en esta práctica, porque la reservan para su uso personal. Tal actitud la refieren con menor frecuencia los titulados en estudios superiores (28%, frente al 38% en estudios medios, y el 34% en estudios de nivel inferior).
El 30% de los encuestados señalan que no pueden encontrar los contenidos digitales que buscan en sitios legales, y en torno a un tercio refiere como motivos más importantes para utilizar fuentes ilegales los aspectos que siguen: se puede disponer del con- tenido en línea de estas fuentes ilícitas con mayor rapidez, no es necesario registrarse, los contenidos de fuentes ilegales son más fáciles de encontrar y resulta más sencillo acceder a los mismos, y las posibilidades de elección son mayores en las fuentes ilí- citas. Todos estos motivos los mencionan más a menudo las mujeres que los varones.
La disponibilidad de contenidos asequibles en fuentes lícitas, el riesgo de sanción y las experiencias negativas constituirían las principales razones para dejar de utilizar fuentes ilegales
Entre los participantes en los grupos temáticos que son conscientes de que utilizan fuentes ilícitas para acceder a contenidos digitales, la pérdida potencial de ingresos que las estrellas de la música o el cine podrían sufrir a causa de su conducta no pa- rece causar una gran impresión. La disponibilidad de contenidos asequibles a través de fuentes lícitas constituiría la razón principal para dejar de utilizar fuentes ilícitas, según la encuesta. Las jóvenes (61% frente al 56% de los varones) y los estudiantes de la enseñanza superior (63%, frente al 49% de otros niveles educativos inferiores) son los grupos sociodemográficos que comparten tal opinión en mayor medida. El riesgo de sanción es el segundo motivo más citado para que los jóvenes finalmente dejen de utilizar fuentes ilícitas. El riesgo potencial de sanción ejerce un mayor impacto en las jóvenes (40%) que entre los varones jóvenes (33%), en el grupo de menor edad (42%) que en los grupos de edad intermedio (36%) y de mayor edad (32%), y en los estudian- tes (38%) más que entre los no estudiantes (30%). El tercer motivo para dejar de utilizar fuentes ilícitas es una mala experiencia. En este caso, el mayor impacto corresponde a una experiencia personal negativa, sobre todo en el caso de las jóvenes (31%, frente al 26% de los varones).
Ropa y accesorios son los productos más comúnmente adquiridos en Internet
La ropa y los accesorios constituyen, con mucho, la categoría de productos más popu- lar entre los que se adquieren en línea por los jóvenes europeos. El segundo producto más popular es el calzado. Ambas categorías de productos las adquieren de manera significativamente más frecuente las jóvenes (73% en el caso de la ropa y los accesorios, y el 50% en el del calzado), que los varones (55% y 41%). Tales productos no solo dependen del género: la compra en Internet de ropa y accesorios y calzado también aumenta con la edad, el nivel educativo y los ingresos. Las entradas, el tercer producto más popular adquirido en línea por los jóvenes, también las compran más a menudo las jóvenes (42%) que los varones (31%). Al igual que la ropa y el calzado, las entradas las adquieren con mayor frecuencia los encuestados de mayor edad, los de mayor nivel de estudios, y los que perciben algún ingreso.
Un método de pago seguro, la calidad y el precio son los aspectos más importantes al adquirir productos en internet
A la seguridad de los métodos de pago aluden casi dos tercios de los consultados. En lo que se refiere a las categorías sociodemográficas, las mujeres jóvenes (69%) y los estudiantes sin ingresos (68%) consideran importante la seguridad del pago en mayor proporción que los varones (61%) y los estudiantes con ingresos (64%). El grupo de menor edad (15 a 17 años) también considera importante este aspecto en una proporción superior a la media. La calidad constituye el segundo aspecto más indicado, sin grandes diferencias entre los distintos grupos sociodemográficos, aunque el grupo de menor edad lo menciona con mayor frecuencia que los grupos de más edad (respectivamente, 68%, frente al 62% y al 60%). El precio es el tercer aspecto considerado por los encuestados, de mayor relevancia para los varones jóvenes (50%, frente al 48% de las mujeres), el grupo de mayor edad (18%, frente al 14% de los de menor edad), los empleados (21% frente al 16%) y los de menor nivel educativo (19%, frente a los de nivel educativo superior).
El 12 % de los jóvenes adquirieron intencionadamente productos falsificados en línea en los 12 últimos meses
Los jóvenes consideran con una mentalidad diferente la adquisición en línea de pro- ductos falsificados en comparación con sus actitudes y conducta al acceder de manera ilícita a contenidos digitales. El análisis cualitativo y cuantitativo pone de relieve que a los jóvenes no les importa en realidad si las fuentes son lícitas o ilícitas cuando reciben directamente (por streaming) o descargan contenidos. Por el contrario, en los grupos temáticos indicaron que no les gustan los productos falsificados y que no les interesa adquirirlos. Tal afirmación la respaldan los resultados del análisis cuantitativo.
Las mujeres jóvenes, el grupo de edad de 18 a 21 años, los estudiantes de enseñanza superior y los desempleados adquieren productos falsificados de manera intencionada con menor probabilidad.
Los productos falsificados parecen tener mala imagen entre los jóvenes. Se supone que son de calidad inferior a la de los productos auténticos. La oferta de productos falsificados se asocia a sitios web "sospechosos" en los que los jóvenes no confían. Los jóvenes europeos temen los fraudes y no desean experimentar perjuicio alguno derivado de la compra en línea de productos falsificados. Los jóvenes son mucho más conscientes de la pertinencia de evitar los productos falsificados teniendo en cuenta todos estos motivos.
Ropa y accesorios constituyen la categoría más popular de productos adquiridos en Internet en general. Las falsificaciones en otras categorías se adquieren con menos frecuencia.
El precio es el principal factor que impulsa la compra de productos falsificados en línea, seguido de la indiferencia y la creencia en que un producto de imitación constituye una "ganga"
Para la minoría de jóvenes que adquieren intencionadamente productos falsificados en línea, el principal factor que impulsa tal conducta es el precio, y a continuación, la indiferencia respecto a que los productos sean falsificados o no. A una cuarta parte de los que adquieren intencionadamente productos falsificados en línea les motiva conseguir una "ganga". Más de uno de cada diez jóvenes compró un producto falsificado porque los sitios que ofrecen los correspondientes originales no se encuentran disponibles en su país.
La disponibilidad de productos originales asequibles, una mala experiencia o el riesgo de sanción llevarían a la mayoría de los encuestados a dejar de adquirir productos falsificados
Casi la mitad de los encuestados dejaría de adquirir productos falsificados si se encontraron disponibles los originales correspondientes a un precio asequible. De nuevo en esta ocasión, el precio parece constituir un claro motivador en la decisión de comprar un producto falsificado. En particular, las jóvenes (53%, frente al 38% de los varones) que adquirieron intencionadamente productos falsificados comprarían los artículos origina- les correspondientes si resultaran asequibles. Una mala experiencia, ya sea personal, de algún amigo o pariente, o de un tercero, constituye otro posible motivo para dejar de adquirir tales productos. En el caso de las jóvenes (44%), una experiencia personal negativa ejercería un mayor impacto que en el caso de los varones (38%). Un tercer factor relevante es el riesgo de sanción, indicado por los encuestados como motivo para dejar de adquirir productos falsificados, aunque solo el 23% del grupo de mayor edad (de 22 a 24 años), ofrece esta respuesta.
Un tercio de los encuestados afirma que puede distinguir los sitios que venden productos falsificados, de los que ofrecen artículos auténticos, y la mitad de los consultados señaló que pueden distinguir entre fuentes lícitas e ilícitas de contenidos en línea
El indicador más importante para considerar una fuente lícita, referido por casi la mitad de los encuestados (48%), es si figuran disponibles los datos de contacto. Por otra parte, un 39% de los jóvenes inciden en el hecho de que si personas a las que conocen utilizan un determinado sitio, existen razones inequívocas para considerar que la fuente en cuestión es lícita. Una proporción similar arguye que, cuando figuran en las páginas de pago los proveedores de servicios de pago y logotipos de tarjetas de crédito, el sitio es legal. La popularidad del sitio web en los resultados de los motores de búsqueda también influye en los jóvenes; así, una proporción ligeramente superior a un tercio (35%) de los jóvenes cree que, cuando el sitio figura entre los primeros resultados que aparecen en una búsqueda, se trata de un sitio legal. Para el 27% de los jóvenes europeos, el hecho de que se muestren anuncios de marcas de prestigio constituye un indicio de que la fuente en cuestión es lícita.
