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Por Redacción - 6 Mayo 2015
Dos realidades están modificando el mundo online. Una es el crecimiento espectacular de los dispositivos móviles. Los smartphones y las tabletas son cada vez más populares y están cada vez más presentes en el día a día de los consumidores, consiguiendo además - y gracias a la popularización de las conexiones de banda ancha móvil - que los usuarios estén todo el día conectados y que empleen en todo momento internet para buscar cosas, acceder a contenidos de ocio o seguir a sus amigos en las redes sociales.
La otra realidad es el creciente interés de los usuarios por un tipo de contenido específico: dentro de los contenidos que les interesan en internet y que consiguen despertar su atención, hay uno que está creciendo de una forma notable. Se trata de los vídeos, que consiguen cada vez más y más visionados y ante los que los consumidores están cada vez más, por así decirlo, enganchados.
Y la suma de una y otra realidad crea un panorama específico en el que un soporte es el que está generando más movimiento y un contenido el que está despertando más interés: juntos crean la tormenta perfecta y consiguen un producto que despierta el interés de consumidores, anunciantes y gestores de contenidos. Los consumidores ven cada vez más vídeos en sus dispositivos móviles, los responsables de contenidos están cada día más interesados en ofrecérselos y los anunciantes están más que decididos a apostar por ese terreno como punto de entrada para llegar a los consumidores. Por ello, la publicidad en vídeo en mobile no ha parado de crecer en los últimos tiempos y está ya creciendo más rápido que la publicidad en escritorio.
Así lo acaba de señalar el estudio de BI Intelligence sobre publicidad en vídeo, que ha concluido que los dispositivos móviles serán el principal soporte de crecimiento en el gasto en publicidad en vídeo en los próximos años. Será en los dispositivos móviles donde la inversión de las marcas en anuncios en vídeo crecerá de forma más notable. Según las previsiones de la firma de análisis, la publicidad en vídeo crecerá tres veces más rápido que la de escritorio de aquí a 2020.
De hecho, según las cifras de la firma, la publicidad en vídeo en escritorio crecerá un 12,9% entre 2015 y 2020 y en general en el mercado lo hará en un 21,9%. En el mercado mobile, sin embargo, subirá un 39,5%.
El boom del vídeo
El vídeo, en general, se está convirtiendo en uno de los formatos favoritos de los anunciantes y en uno de los que moverá elevadas cantidades de dinero. Solo en el mercado estadounidense, la publicidad en vídeo moverá al cierre de este año 5.000 millones de dólares y se espera que llegue a los 13.300 millones anuales al cierre de 2020.
El estudio ofrece varias explicaciones para este cambio en los comportamientos de los anunciantes y en este creciente interés en la publicidad móvil. Por una parte, recuerdan, el vídeo está adueñándose del espacio destinado hasta ahora a los anuncios estáticos de display que se veían en escritorio. Las previsiones son, de hecho, que en 2020 sean el 41% de todo el gasto publicitario en display en escritorio.
Además del creciente interés de las marcas, los anuncios en vídeo están también calando en el consumidor. Los vídeos están funcionando mejor que los anuncios normales y tienen ya un ratio de clics que es 18 veces superior que un banner.
E, igualmente, la industria se está lanzando a crear las herramientas necesarias para poder ofrecer esa publicidad en vídeo. Tanto los medios de comunicación como las redes sociales están generando vídeos y creando las herramientas necesarias para sus usuarios suban este tipo de contenidos, creando un mercado mucho más dinámico y completo. Así, por ejemplo, tanto Facebook como Instagram o Twitter han lanzado productos asociados a vídeos en los últimos meses.
La publicidad en vídeo es además un dulce caramelo para los medios y las webs en general ya que sus precios son más elevados que la publicidad online en general. Las unidades publicitarias en vídeo suelen ser dos o tres veces más caras que los demás anuncios.
