Artículo Comunicación

Lo que una mala comunicación o nota de prensa puede decir del ego de las empresas

Las marcas y sus responsables suelen creer que todo lo que hacen no solo es relevante, sino que además es siempre valioso

Por Redacción - 10 Noviembre 2016

Quien haya tenido que trabajar haciendo comunicación corporativa en alguna ocasión sabrá posiblemente de lo que vamos a hablar casi desde la primera letra de la primera oración de este artículo, ya que posiblemente ellos se hayan tenido que enfrentar en algún momento a una situación como esta. Alguno de los directivos de la compañía está convencido de que la última cosa que han hecho (que puede ser tan emocionante como cerrar un acuerdo con una pequeña empresa) es material de nota de prensa y no solo le pide a su equipo de comunicación que escriba y mande esa nota de prensa, sino que además está convencido (y no entiende por qué no ocurre así) de que aparecerá en todos los medios de comunicación que a él le interesan.

Comunicación ¿Sin remedio?

Muchas veces, y por muchas explicaciones que den desde el departamento de comunicación de lo poco relevante que es esa información y de lo inviable de que aparezca en los medios que el directivo está convencido que lo llevarán a portada, no se puede hacer mucho por convencer al directivo en cuestión de cómo es la realidad. El departamento de comunicación no tendrá más remedio que hacer una nota de prensa sobre cualquier tema irrelevante y mandarla de forma masiva a los medios de comunicación que tiene en su base de datos, sabiendo, posiblemente, el impacto altamente negativo que este envío tendrá en sus receptores.

Porque, y esto es otro hecho, cada día los periodistas y los medios reciben muchísimas notas de prensa, notas que no leen en la mayoría de los casos (la mayoría se van a la papelera de reciclaje sin haber pasado ni siquiera por el abrirla para ver de qué va) y que en otros pueden resultar contraproducentes para la marca. Porque, en medio de esa avalancha de mails, nada resulta más molesto que recibir información irrelevante, que no encaja con tu medio o con tu área de trabajo o que ya te han enviado el día anterior. La guinda que pueden poner a esto es, simplemente, el después llamar a la redacción para preguntar si resulta interesante o si se va a publicar (y cuando: nada hace que la imagen de una marca se vea más lastrada que el pedirles a los periodistas el "avísame cuando salga").

Pero todo esto no daña solo la imagen de la marca y su relación con los medios, sino que además reafirma una idea y hace que la percepción general que se tiene de la compañía esté mucho más asentada en un elemento. Este envío de notas de prensa irrelevantes, de notas de prensa con cero interés informativo, es una suerte de pista, de demostración, de que el ego de las marcas es muchas veces demasiado grande. Las marcas y sus responsables suelen creer que todo lo que hacen no solo es relevante, sino que además es siempre valioso. Para los periodistas que reciben esas notas de prensa todas esas notas sobre al final nada suelen hacerles pensar que la imagen que las marcas tienen de ellas mismas es, más o menos, como si hubiesen descubierto la cura a la última gran enfermedad.

Las cosas no funcionan así

Todo ello es ya un error en un mundo en el que cada vez se valora más la humildad y la honestidad, pero mucho más lo es cuando con ello se está lastrando las relaciones con aquellos que la marca espera que funcionen como altavoz de sus logros, méritos y movimientos. Al corazón de los periodistas no se llega con una nota de prensa sobre cada cosa que se hace y sobre cada cambio irrelevante.

¿Qué merece y qué no una nota de prensa?

Las marcas tienen que hacer un ejercicio de autocrítica y tienen que pensar si realmente lo que tienen entre manos es relevante e interesante. ¿Aporta algo lo que se está lanzando al mundo? ¿Es una información realmente nueva e interesante?

Uno de los mejores ejercicios es ponerse en la piel del otro. Pensar en otra marca mientras se analiza la información que se quiere mandar puede ayudar a ver las cosas con perspectiva. ¿Nos resultaría interesante esa información si la estuviese mandando la competencia? Si la respuesta es que no, entonces lo mejor es no lanzar nunca esa nota de prensa.

Más Leídos
Semanal
Mensual
Anual
Continua Leyendo...
Contenidos Patrocinados
ADS
Promocionados