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La máxima de los pagos con móvil es la simplicidad. Cuanto menos esfuerzo, incluso físico, requiera el proceso de compra mayor será su popularización. Y si para ello no hay que usar las manos, mejor. Precisamente una muletilla muy repetida dentro de la industria, incluidas las compañías de tarjetas de crédito, es que para que los pagos con móvil despeguen tienen que ser más sencillos de usar que una tarjeta. O al menos, aportar algún valor añadido. Por eso, no tener si quiera que sacar del bolsillo el teléfono para que te cobren puede ser ya un paso adelante.
En España, durante el primer trimestre de este año un 13% de los españoles utilizó dispositivos móviles para comprar y se prevé que el m-commerce genere 1.500 millones de euros a finales de 2017, según Forrester Consulting. Las compras empezaron con productos digitales como aplicaciones y programas, pero hay indicadores de que la tendencia va a extenderse a otro tipo de productos y servicios.
A pesar de ello, un reciente estudio elaborado por por JP Morgansobre la situación del negocio de los pagos móviles revelaba que, aunque su tamaño todavía no es significativo, está creciendo rápidamente, gracias sobre todo a las soluciones promovidas por las redes internacionales de tarjetas de pago como Visa y MasterCard.
En cuanto a los diferentes sistemas emergentes, el mercado se ha casi saturado con compañías de todos los tamaños, desde start-ups a empresas ya consolidadas que lucha por la supremacía, pero la falta de estándares comunes y una aceptación amplia, dificulta que una solución consiga adquirir una posición preminente.
Empresas comoVisaySamsung,que desde 2005 ha sido pionera en dispositivos con tecnología NFC, también anunciaban recientemente una alianza global que combina la experiencia de Visa en sistemas de pago, con el liderazgo de Samsung en el campo de la tecnología de dispositivos móviles. Se trata de una alianza que tiene el potencial de acelerar significativamente a nivel mundial la posibilidad de pagar con dispositivos móviles.Según este acuerdo, las entidades financieras que estén planificando poner en marcha programas de pagos móviles podrán utilizar el Servicio de Aprovisionamiento de Visa Mobile (Visa Mobile Provisioning Service) para descargar de forma segura la información de las cuentas de pago en dispositivos de Samsung dotados de la tecnología NFC.
Sin embargo, las nuevas propuestas y evoluciones tecnológicas avanzan en este objetivo. El anuncio de PayPal Beacon la semana pasada es uno de esos indicadores. Un sistema que permite a los consumidores registrarse automáticamente en las tiendas. En lugar de usar la tecnología NFC, PayPal usa Bluetooth para transmitir la información, porque así los consumidores pueden pagar con el manos libres. Ese es el adelanto en el servicio y el potencial atractivo frente a las tarjetas de crédito. La apuesta de PayPal por el móvil se basa sencillamente en los volúmenes de compras a través de este dispositivo que registra la compañía. 14.000 millones de dólares el año pasado (Juniper Resarch) aunque para 2013, esta cifra podría alcanzar los 20.000 millones de dólares.
Tampoco podrían faltar a la cita algunas redes sociales como Facebook, que de forma no casual,pretende hacerle sombra a PayPal con los pagos móviles.La iniciativa consistiría en utilizar el login social de Facebook para agilizar el proceso de pago a través de los dispositivos móviles, con la previa vinculación de la cuenta de Facebook a los datos bancarios del usuario. Se trataría de un paso adelante en Facebook Coonect, el sistema que muchas webs ya utilizan por defecto como vía de registro. El gran reto sería como implantar dicho sistema en el resto de soluciones que puedan estandarizarse y adaptarse en los comercios off-line y analizar a fondo hasta qué punto es garantizada la seguridad de sus usuarios.
Por otro lado, el nuevo lector de huellas dactilares para iPhone que Apple desveló la semana pasada también es un buen indicador de esta tendencia, ya que el móvil se está convirtiendo en un dispositivo altamente seguro para realizar los pagos, el cual conceptualmente está bastante vinculado a iTunes. Los usuarios ya están acostumbrados a comprar ahí.
Otro ejemplo es Square, que desde hace un tiempo permite al consumidor entrar en una tienda y básicamente enviar automáticamente su información a la caja. Después un sencillo mensaje permite al cliente pagar sin tener que hacer colas ni pasar por el proceso físico del check out. El resultado que obtengan iniciativas como la de PayPal o Square nos darán la clave para saber más sobre el futuro de los pagos con móvil.
Lo que es evidente es que el futuro de los pagos móviles es prometedor y puede que no muy tarde se consoliden las propuestas más prácticas y realmente eficaces, pero de momento,nos encontramos ante un mar revuelto en medio de una tormenta. Eso sí, muy prometedor.
