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Por Redacción - 17 Junio 2015
Como la carta a los Reyes Magos, no es muy complicado hacer una lista con las características deseadas de cada uno de los trabajadores de la empresa. Los responsables de la misma seguramente lo tengan muy claro, aunque sus peticiones quizás no siempre sean muy objetivas.
¿Qué es lo que realmente se le tiene que pedir a los trabajadores? No vale con querer imposibles o desear cosas que no se pueden esperar partiendo de ciertas condiciones (en resumen, no se puede esperar que el becario sienta tan propia a la empresa como para dedicarle todas sus horas libres), sino que hay que tener cierta visión general de lo que es factible y, sobre todo, de lo que debería ser deseable. Cada puesto tiene unas cualidades en las que los trabajadores no deberían fallar y que son decisivas para lograr los objetivos de la empresa.
En el caso del responsable de marketing, corresponde al de un perfil con un papel que marca ámbitos decisivos para la compañía (y que es al fin y al cabo el trabajador que garantiza que los productos y los servicios de la empresa lleguen al consumidor final), ciertas son las características que no deberían fallar.
Debe cumplir con las expectativas del trabajo (y hay que decirle realmente lo que hará)
Las empresas tienen siempre una lista muy amplia de exigencias que quieren que sus empleados cumplan y también una muy extensa de expectativas sobre lo que tendrá que conseguir el fichaje que realizan. A todos les piden una suerte de milagros y les exigen tantas capacidades y conocimientos que el trabajador parece, más que un profesional de la tarea que toca, una especie de superhéroe que puede cubrirlo todo.
Pero lo cierto es que la lista de exigencias no debe ir solo por un lado. Tiene que ser una cuestión de ida y vuelta. No solo se tiene que esperar que los trabajadores cumplan con ciertas exigencias, sino que además hay que ser siempre conscientes de que el trabajador fichado esperará que se cumpla con lo prometido. No vale con pintar el trabajo muy bonito si después no es exactamente lo prometido. Con ello, solo se conseguirá que el empleado se sienta frustrado.
Debe ser un mix de ciertas cualidades
¿Qué hay que exigirle al perfecto profesional de marketing? ¿Cuáles deben ser esas cualidades innatas que es necesario que cumpla? Como explican en una columna de opinión en The Huffington Post (una titulada de forma bastante prometedora "las cualidades de los responsables de marketing que me gusta contratar"), los buenos trabajadores del área de marketing son el resultado de un mix de cualidades. El trabajador en el que se cruzan estos cuatro puntos es el más adecuado para cumplir con las exigencias de la firma.
Por una parte, el trabajador debe ser ambicioso. La ambición es muy importante porque tendrá que enfrentarse a un mundo hipercompetitivo en el que todo el mundo está intentando lograr triunfar y en el que no queda más remedio que luchar con uñas y dientes. Por otra, tiene que ser una persona que trabaje duro, hay que valorar su capacidad para el esfuerzo.
Y, además, tiene que ser empático, ya que tiene que ponerse siempre en los zapatos de sus consumidores y tiene que entender qué quieren y qué esperan. Esta capacidad para ver más allá de sí mismo no se aplica únicamente a este punto. También tiene que tener una buena capacidad de aprendizaje: nunca puede perder el interés por aprender y descubrir nuevas cosas.
Debe ser creativo
Por supuesto, y teniendo en cuenta el papel que tendrá que cumplir en la empresa, el responsable de marketing tendrá que ser especialmente creativo. No se puede dejar la estrategia de marketing de una empresa en manos de quien no sabe pensar fuera de su zona de confort o "fuera de la caja". Tiene que ser capaz de tener siempre ideas (más o menos brillantes pero siempre llamativas y diferentes) y tiene que ser capaz de ver las cosas siempre desde un prisma distinto. ¿Por qué están fichando las empresas a tantos periodistas y novelistas últimamente? La razón es que necesitan a profesionales que sepan contar y construir sus historias, que sepan ir más allá de lo obvio. El responsable de marketing también tiene que hacerlo.
Debe conocer la tecnología
Pero en el mundo en el que nos movemos no vale solo con ser capaz de pensar algo diferente sino que también hay que conocer cosas mucho más tangibles y concretas. El mundo actual está marcado por la tecnología. No solo está toda la tecnología que usan día a día los consumidores y que hay que conocer y dominar para poder crear mensajes que realmente funcionen cuando se está tratando de seducirlos, sino que además la tecnología es cada vez más importante a la hora de establecer el día a día de la empresa.
La tecnología es fundamental para entender cómo comunicamos (ya que ahora todo está marcado por internet), cómo servimos los mensajes (al fin y al cabo, la publicidad programática y elementos similares son cada vez más recurrentes) o qué comunicamos (el big data está sirviendo para analizar todo lo que se debe decir y todo lo que se debe hacer).
Debe ser un buen gestor de equipos
Todo responsable de toda área de negocio debe tener una cualidad que la empresa no puede obviar y no puede dejar de exigir. Tiene que ser un buen gestor de equipo, pero este elemento se convierte aún en más importante cuando a quien se le está pidiendo es al responsable de marketing. Sus responsabilidades y las exigencias que impondrá su trabajo no solo afectarán a su equipo directo sino que tendrá también un efecto en el resto de los trabajadores de la empresa. Al fin y al cabo, su trabajo tiene un cierto efecto transversal y necesita de la colaboración de más áreas que la suya propia. Por ello, el buen responsable de marketing tiene que ser capaz de tratar bien a las personas, tiene que saber motivar a los otros y tiene que ser capaz de crear relaciones de calidad.
