Opinión Empresas

La crisis del 'embarazo' de Mango

Strategic communication consultant. Specialized in media relations; risk and crisis...

Lo que pueden cambiar las cosas en unas pocas horas. También en el mundo empresarial. Ahora estás arriba, y cuando hayas dado media vuelta, puedes estar un peldaño por debajo. O en lo más profundo...

El pasado 30 de mayo, Mango celebró una nueva edición de sus Fashion Awards, en una fiesta en Barcelona con la crème de la crème del mundo de la moda. Decenas de medios de comunicación cubrieron el acto por la presencia de multitud de famosos y por la buena marcha de la compañía catalana pese a los tiempos que corren. Una noche perfecta. Y a las pocas horas, aparece un vídeo en Youtube en el que una mujer denuncia públicamente a Mango por un despido improcedente. Ya tenemos la crisis.

Las redes sociales es lo que tienen. Que viralizan en exceso. Para lo bueno y para lo malo. Y ese vídeo fue el detonante de una amalgama de críticas a la compañía dirigida por Isak Andic. Pero volviendo un poco atrás... ¿de qué se trata ese vídeo?

Acción-reacción

Laura es la protagonista de la historia. En tan solo medio minuto, la joven explica en un vídeo que Mango la ha despedido por el simple hecho de estar embarazada. Su responsable la invitó a causar baja voluntaria para reincorporarse tras el nacimiento del bebé, pero Laura se negó. El resultado fue el despido y la posterior cadena de acontecimientos en las redes sociales y también en los medios tradicionales. Críticas en Youtube apoyando a Laura (y otros defendiendo a la marca), tweets cargando contra Mango e incluso una campaña en la que se han recogido más de 30.000 firmas para pedir al director de RSC de Mango -Xavier Carbonell- que readmitan a Laura.

Laura ha hecho lo que creía conveniente. Utilizar las redes sociales como altavoz para expresar su malestar por esa situación deplorable (por supuesto, en caso que sea cierta). Y Mango, ¿qué ha hecho? Pues bien, la firma de moda catalana envió un comunicado a los medios de comunicación expresando su absoluto rechazo ante la denuncia de Laura. Mango desmiente las acusaciones a través de argumentos numéricos. El 75% de los trabajadores son mujeres, de las cuales un porcentaje destacado son madres a lo largo del año.

Y se acabó. Mango no ha tomado ninguna otra iniciativa ante la avalancha de críticas en los Social Media. Ni una sola. Ha habido un silencio absoluto ante esta denuncia, mientras la compañía seguía con su actividad habitual en sus diferentes perfiles. Evidentemente Mango habrá tomado nota de lo que ha estado sucediendo (quiero creer), pero solo ellos saben por qué han seguido esta estrategia del silencio.

¿Estrategia del silencio?

Tiene una parte positiva, y es que su reacción ante la avalancha de comentarios negativos vertidos podría haber desencadenado un mayor efecto "bola de nieve", lo que hubiera mantenido vivo un tema que poco a poco (tampoco lo neguemos) ha ido perdiendo peso en la red. Con el silencio, han esperado a que todo quedara en el olvido... ¡Pero cuidado porque siempre puede reavivarse!

Esta estrategia también tiene una parte negativa; muy negativa. Dejas todo el peso/responsabilidad a las personas para que hablen sobre ti, en este caso mal, cuando quizá todo lo que dicen es incorrecto. No se trata de responder a cada comentario, pero sí de mostrar una cierta predisposición a solucionar la situación, a plantear tu verdad, y en definitiva, a defender la marca (la reputación). Pero nada de nada.

Veremos si finalmente la estrategia de Mango ha sido la más afortunada... Mientras tanto, la gente sigue hablando. ¿Creerá Mango eso de que "es mejor que hablen mal de ti a que no hablen"?

Strategic communication consultant. Specialized in media relations; risk and crisis...
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