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Las 6 líneas maestras para comprender a los miembros de la Generación Z

Por Redacción - 6 Noviembre 2017

Hasta hace unos meses, todo lo que importaba y todo lo que interesaba eran los millennials. Los millennials protagonizaban todos los estudios, todos los análisis y todas las predicciones, porque las empresas y sus responsables estaban totalmente obsesionados con ellos. ¿Qué había llevado a este punto? La clave estaba en los propios millennials. Eran como un escenario incomprensible ante el que las empresas no sabían cómo reaccionar, lo que llevaba a que se interesasen más por todo aquello que intentaba desentrañar sus misterios. Pero, desde entonces, las empresas han empezado a jugar con otros elementos y a intentar posicionar otras cuestiones. Ahora quieren comprender a los adolescentes.

¿Por qué los adolescentes se han puesto de moda? Por un lado, son el recambio de los millennials y lo que interesa a las marcas y empresas. Por otro lado, siguen siendo un completo misterio, ya que como antes lo fueron los millennials no son lo que las empresas esperaban. A todo ello se suma que los adolescentes, o los miembros de la Generación Z, su nombre de estudio, no son exactamente una prolongación de los millennials. De una generación a otra se ha producido un cambio y una ruptura.

Las empresas están por tanto empezando a obsesionarse con los Z e intentando saber qué tienen que tener en cuenta para conectar con ellos. En un reciente análisis de Hootsuite, han dado seis líneas maestras para intentar comprenderlos.

Son ya también la generación más grande de la historia

Vale, no es algo tan nuevo. Cuando apareció la fiebre de los millennials, también se decía de ellos algo parecido. En términos estadísticos, señalaban los expertos, los millennials eran atractivos para las empresas porque suponían un grupo de población muy grande, la generación de mayor tamaño que estaba en ese momento en el mercado. El reinado acaba de pasar a manos de los Z. Los adolescentes ya son los más numerosos, al menos en lo que a los estudios estadounidenses se refiere. En EEUU son el 26% de la población.

Son la generación que pasa de Facebook

Para los millennials, la tríada de las redes sociales triunfadoras es Twitter, Facebook e Instagram. Para los Z, la cosa es diferente. De hecho, Facebook no tiene un peso tan importante en este grupo demográfico. Para los adolescentes son mucho más interesantes las redes sociales que permiten mantener mayores parámetros de privacidad, por eso son fans de apps como Snapchat. Si se quiere conectar con ellos, por tanto, no hay que usar las redes sociales de siempre, sino crear nuevas campañas que se adapten a estos nuevos entornos.

Las redes sociales tienen un peso diferente en sus vidas

O lo que es lo mismo, las emplean para más cosas que simplemente ocio y entretenimiento o para estar en contacto con sus amigos. Un gran ejemplo está en cómo emplean las redes sociales en su educación. Un 52% de los Z emplea las redes sociales para buscar información para trabajos educativos y para estar en contacto con sus compañeros de clase. Las redes sociales son para ellos un recurso educativo.

Aman YouTube por encima de todas las cosas

Además de emplear de un modo diferente las redes sociales, también tienen una preferencia que destaca por encima de la comparación con otras generaciones. Ellos aman por encima de todo a YouTube. Tanto es así que la red de vídeos es la más usada de las plataformas de redes sociales entre los adolescentes. Un 84% de los miembros de la Generación Z emplea YouTube, lo que hace que una buena estrategia de vídeo sea una de las maneras más directas para llegar al corazón de los Z.

Son más emprendedores

Un 72% asegura que quiere tener su propio negocio y un 76% que quiere convertir sus hobbies en su profesión. Quizás sea un efecto del entorno socioeconómico en el que crecieron, pero quieren ser sus propios jefes.

Aman las tiendas (¡físicas!)

Una de esas cosas que sorprenden sobre los hábitos de los miembros de la Generación Z y sobre sus intereses es su pasión por las tiendas físicas. A pesar de ser la generación más internetizada, un 77% reconoce que sigue prefiriendo hacer compras en tiendas físicas y no en ecommerce. Hay quienes recuerdan, eso sí, que esto se puede explicar por la propia esencia de la vida adolescente. No tienen tarjetas de crédito y dependen mucho más de sus padres cuando quieren hacer compras online.

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