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Frente a la elevada tasa de penetración de los dispositivos móviles, la demanda de aplicaciones ha subido como la espuma. Una proliferación que ha hecho posible la implantación del modelo freemium de forma generalizada.
Un ejemplo de ello es SwiftKey, la aplicación de texto productivo inteligente que, recientemente, se ha pasado al modelo freemium, permitiendo descargar de forma gratuita un producto que hasta entonces costaba 4 dólares.
¿Es rentable el modelo de las aplicaciones freemium?
A tenor de la estrategia que siguen estas grandes empresas, parece ser que sí. Una de las razones que nos lleva a esta conclusión es que ya más de la mitad de los consumidores en los países europeos dispone de un terminal inteligente; una proporción que también se aplica a Estados Unidos. Por ello, la ampliación del mercado permite dar a conocer un servicio de calidad, de forma gratuita, y rentabilizarlo en base a ofrecer mejoras sobre el mismo, con un módico precio.
Flurry indicaba a principios de año que en 2013 el número de aplicaciones móviles, en todas las categorías, aumentó un 115% más que el año anterior. Un aumento que se evidenció especialmente en el caso de las aplicaciones de mensajería e imágenes; llegando a avanzar un 203% año tras año.
¿Todos los usuarios de estas aplicaciones están dispuestos a pagar?
La respuesta es no. Por muy bueno que sea el producto, y las ventajas de su modelo de pago, no todos los usuarios están dispuestos a pagar una módica cifra por seguir utilizándolo, o por mejorar las condiciones de su servicio. Por ello, ante este grupo que no quiere contribuir económicamente a rentabilidad el servicio, existe la opción de mostrarle publicidad.
Estas aplicaciones constituyen el soporte ideal para impactar a los clientes, quienes reciben los mensajes de marcas y productos, a cambio de seguir utilizando un servicio de forma gratuita.
Nos encontramos en pleno auge de la publicidad móvil. Se espera que en 2015 represente el 8% de la inversión publicitaria global, y un notable 20% respecto a la publicidad digital.
Asimismo, las aplicaciones móviles constituyen el soporte ideal para llegar a los usuarios de estos dispositivos inteligentes, dado que invierten en ellas hasta el 85% del tiempo que dedican al móvil.
El Informe Global sobre Experiencia de los Usuarios Móviles, publicado en noviembre por Compuware mostraba que a la hora de elegir entre utilizar una aplicación móvil, o navegar por un sitio web adaptado para móviles, los usuarios no dudan, el 85% se queda con las apps. Con el añadido de que estos usuarios dedican más tiempo a las apps que a la web.
