Durante años, las marcas han enfocado sus estrategias de marketing en crear discursos que propaguen sus valores, logros e iniciativas. Hoy, parece que esa visión de la mercadotecnia se está quedando corta. Los consumidores han cambiado. Cada vez son más conscientes de su entorno y buscan, a través de su estilo de vida, tener un efecto positivo en el mundo. Por lo que ahora, exigen rendición de cuentas por parte de las marcas y buscan consumir productos que vayan acorde a sus valores. Esto implica un gran reto para la industria, ya que las marcas tendrán que invertir recursos y esfuerzos en conocer mejor a su consumidor y demostrarle, a través de acciones, que cumplen con una visión positiva del mundo.
