Por Redacción - 25 Marzo 2013
Vivimos en una era conectada, que nos permite estar permanentemente comunicados, puntualmente informados de los últimos acontecimientos, e incluso tener en nuestra palma de la mano a nuestros amigos, conocidos y cómo no, a nuestra empresa. Esto abre las puertas a una nueva forma de trabajar, de mantener la comunicación con todo lo que nos rodea, e interactuar; que favorece la puesta en común de conocimientos, necesidades y contactos. La irrupción de las redes sociales, inundando todos los aspectos de nuestro día a día, puede tener grandes ventajas para la organización, dado que implica:
Un nuevo modo de escuchar, de acceder a la información y descubrir tendencias.
Las redes sociales son una eficaz herramienta para medir el termómetro social, para averiguar qué temas son los más importantes en cada momento, cuáles son los que más interesan a la gente. Además, permite fácilmente monitorizar tópicos y conocer las opiniones de la audiencia a tiempo real.
Permite un trato más directo y cercano con el cliente.
Supone dejar una puerta abierta entre la empresa y los clientes, con la cercanía y accesibilidad que ello implica. Las redes sociales permiten que la comunicación fluya bidireccionalmente de forma instantánea, favoreciendo así sustancialmente la confianza del cliente en la marca.
Nuevos medios de atención al cliente.
Los clientes han adoptado las redes sociales como una extensión de su vida cotidiana; conocen sus cualidades como medio eficaz de comunicación y no dudan a la hora de utilizarlo también como medio para llegar a la empresa. Por esta razón, el departamento de atención al cliente ya no es el que era; la empresa no puede centrarse únicamente en los canales propios, sino que ha de vigilar de cerca la actividad que se desarrolla en el medio 2.0 y utilizarla en su favor. Bien gestionada, puede suponer además el ahorro en costes económicos de call center.
Mayor democratización en la empresa y accesibilidad a las altas esferas.
En esta sociedad conectada, todos tienen voz, lo que no ha de tomarse como una amenaza, sino como una gran oportunidad para fortalecer internamente a la empresa. Gracias a las redes sociales, los empleados tienen la capacidad de transmitir, lo que les debe permitir dirigirse directamente a cualquier figura de la empresa, así como de interactuar con otros empleados y fomentar el sentimiento de pertenencia a la organización. Otra gran ventaja es que los empleados pueden actuar como voz de la empresa, de cara al exterior.
Un problema supone un reto colectivo.
Las herramientas 2.0 favorecen especialmente a las grandes corporaciones, máxime si cuenta con varias delegaciones. Las reces sociales permiten una colaboración estratégica, aprovechar el potencial de todos los miembros de la empresa de forma rápida y efectiva, aún en la distancia.
Comunicación más directa con nuestros proveedores y colaboradores.
El día a día de la empresa implica asimismo la relación con agentes externos, la cual resulta indispensable para la actividad de nuestra empresa. Por ello es necesario reforzar dicha vinculación, desde un punto de vista estratégico, así como abrir nuevos horizontes y hacer nuevos contactos, mejorando así la competitividad de la empresa.
Potenciando el networking.
Aunque se trata de una práctica que siempre ha existido, gracias a las redes sociales han tomado una nueva dimensión. Estos nuevos canales hacen posible la conexión fluida entre profesionales físicamente muy alejados, dando lugar a interesantes proyectos y la colaboración mutua, independientemente del lugar en que estos se encuentren.
¿Cómo afecta las redes sociales en tu trabajo diario? ¿qué otras ventajas suponen para ti?