Artículo Branded Content

La optimización de contenidos, un arma para que tu presupuesto sea más rentable y eficaz

Consultora especializada en estrategia de contenidos

El contenido siempre se puede reutilizar y readaptar para que perdure en el tiempo. Pero, antes de entrar en materia y contarte lo que puedes ahorrarte optimizando tus activos, te damos algunos datos que hablan a favor de la generación de contenidos de marca. ¿Sabías que más de 45 millones de españoles están en Internet y consumen una media de 5 horas diarias de contenidos, información y/o entretenimiento? Además, 40 millones de nosotros también usamos las redes sociales, con un consumo medio de 2 horas al día, según datos de la consultora We Are Social y Meltwater.

Ahora, reflexionemos: ¿no es lógico entonces que tu plan de marketing integre una estrategia de contenidos para cubrir las necesidades insatisfechas de las personas a las que quieres llegar? De esta forma, comenzarás desde un inicio a fortalecer la relación que quieres tener con ellos y a focalizar tus esfuerzos de tiempo y dinero en generar contenido útil y concreto para tu audiencia, al tiempo que rentabilizas mejor tu inversión.

Recordemos que una estrategia de contenidos eficaz comienza por conocer muy bien a las personas de la marca y las necesidades de esta, para luego unir ambos intereses y estructurar los territorios de comunicación afines y legítimos a dicha marca.

Evidentemente cada marca es un mundo y no podemos dar un dato concreto de ahorro, depende de cada caso. Lo que sí podemos decir es que, si dedicas primero tus esfuerzos a conocer bien a tu audiencia y a organizar la generación de contenidos desde la escucha activa de las personas, luego te será más fácil realizar cualquier campaña o acción en tus diferentes canales, sabiendo bien a quién te diriges y lo que necesita recibir de ti como marca.

Por otro lado, una buena estrategia de contenidos también integrará un estudio pormenorizado del contenido existente. Auditar y reoptimizar las piezas de comunicación que ya haya creado anteriormente la marca, es un punto fundamental de nuestro trabajo de consultoría de contenidos. Pues, se puede aprovechar lo que ya existe mejorándolo y adaptándolo a los nuevos objetivos que nos ha marcado la estrategia de contenidos previa.

Para ello, primero debemos hacer un inventario y conocer todo el material del que disponemos. Con una simple hoja de cálculo puedes ir haciendo un listado con la información esencial que requieres conocer de tu contenido del blog o de tu canal de YouTube. Apunta la fecha de creación, categoriza el contenido, toma nota de la url, título, datos de funcionamiento (visitas o visualizaciones), y otros aspectos que te puedan ayudar a diferenciar esa pieza en un futuro.

Dependiendo del tipo de contenido el inventario puede requerir una información u otra. Es decir, por ejemplo, si estamos auditando vídeos de YouTube, podremos hacer cambios más estructurales y de forma, pero no podremos editar el vídeo y en caso de los artículos sí, por lo que los datos que recojamos variarán.

Con un inventario, para empezar, puedes prevenir la canibalización de contenidos y evitar crear una y otra vez artículos sobre el mismo tema. Además, puedes priorizar y dar más visibilidad a aquel contenido que mejor funciona y, por otro lado, eliminar el obsoleto o el duplicado, redirigir tráfico a una misma url y hacer limpieza para ofrecer contenidos actualizados a tus suscriptores.

El siguiente paso sería reoptimizar y mejorar todo ese contenido que tienes, alineándolo a la nueva estrategia y a los nuevos objetivos de la marca. Con este sistema, puedes además categorizar en función de la situación en que se encuentre cada contenido, por ejemplo, puedes usar etiquetas o un semáforo de colores para indicar a tu equipo en qué estado de revisión se encuentra cada contenido.

Un aspecto que debes valorar de la auditoria de contenidos es que te proporciona información muy concreta a simple vista, para que puedas incluir este material en nuevas campañas u otras acciones retocando detalles de la pieza que se adapten a los nuevos objetivos. Se trata entonces de optimizar tu contenido continuamente y también mejorarlo a nivel SEO y de búsquedas. Por ejemplo, puedes tener páginas o artículos del blog con tasas de rebote altas y revisando los titulares o la estructura pueden mejorar su interés sin recurrir a crear un nuevo artículo.

Como ves, auditar y optimizar contenido existente siempre es más rentable que producir todo el tiempo nuevo contenido. Además, si cuentas con contenido evergreen desde la base de tu estrategia, puedes rentabilizarlo durante largo tiempo y proporcionar contenido a tu audiencia durante años, tan solo con aplicar pequeños matices y cambios.

En este enlace puedes ver un ejemplo de estrategia de contenidos completa de la marca Ikea

Consultora especializada en estrategia de contenidos
Más Leídos
Semanal
Mensual
Anual
Continua Leyendo...
Contenidos Patrocinados
ADS
Promocionados