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La tragedia que se vive en el país nipón sirve demuestra para evaluar el rol fundamental que los social media están jugando en la nueva estructura de comunicación global. Con las comunicaciones telefónicas inicialmente interrumpidas por el desastre, el propio Departamento de Estado de los Estados Unidos recomendó a sus compatriotas: “Traten de contactar a sus seres queridos a través de los medios sociales”. Menos de una hora después del primer temblor, los tweets desde Tokio llegaron a 1200 por minuto, según cifras de Tweet-o-Meter. Un día después, el sábado 12 de marzo, se habían creado casi 600 mil nuevas cuentas de Twitter y el número de tweets enviados en 24 horas ascendía a 177 millones.
Con la posibilidad de mostrar imágenes de los sucesos prácticamente en tiempo real, YouTube fue otra de las redes que se vio plagada de contenidos en las horas posteriores a la tragedia: se estima que durante las horas posteriores a la tragedia se subieron a la plataforma 9 mil videos relativos al terremoto, y 7 mil con imágenes del posterior tsunami. Pero no sólo el contenido generado por los usuarios tuvo un lugar preponderante en la web. También diversas empresas pusieron en marcha campañas destinadas a ayudar a las víctimas de la tragedia. La más significativa fue probablemente la de Google, con su herramienta Google Person Finder, que permite buscar o brindar información sobre personas presentes en las áreas afectadas.
Otra de las compañías de la web que lleva adelante iniciativas solidarias es la desarrolladora de videojuegos online Zynga. La creadora de éxitos como CityVille, Farmville y Mafia Wars permite donar créditos de sus juegos, que serán convertidos en dinero en efectivo y destinado la fundación Save the Children Japan.
Pero lo principal es, sin dudas, el tipo de uso que están teniendo las redes sociales. Los usuarios están usando sitios como Facebook y Twitter para conocer la situación de sus seres queridos, o para informar sobre su estado en caso de que se encuentren cerca de la zona del desastre. Además, los social media se están convirtiendo cada vez más en herramientas fundamentales a la hora de tomar conocimiento de una situación en tiempo real. Organizaciones como el ejército de los Estados Unidos postean información de manera constante en redes como Twitter, y resultan una fuente de información muchas veces más eficiente y rápida que los medios tradicionales.
Los medios sociales llegaron para quedarse. No se van a ir, más bien por el contrario, van a multiplicarse y diversificarse. Situaciones como la de Japón demuestran la utilidad real que tienen las plataformas de sociabilidad online. No son simples herramientas de esparcimiento para adolescentes, como algunos (por suerte cada vez menos) creen. Por el contrario, los social media están demostrando ser plataformas de comunicación con un potencial casi infinito, que pueden ser adaptadas a los más diversos usos.
