Continua Leyendo...
Existen dos tipos de profesionales, los buenos y los malos. En cualquier campo,da igual, siempre nos podemos encontrar a personas que realizan su trabajo de manera impecable, cuidando cada detalle y yendo siempre de frente, y otros que se hacen llamar así, pero que desarrollan una labor que, en absoluto, es defendible profesionalmente hablando.
En el caso del mundo dospuntocero, por su relativa novedad, es fácil encontrar a personas que ofrecen un servicio de calidad, aparentemente, pero que en el fondo, no es más que charlatanería. Basta con haber leído un par de artículos para hacer creer a alguien que no sabe de lo que le estamos hablando que sabemos lo que nos traemos entre manos.
Un buen profesional no te vende humo. No hablo ya de expertos, porque es complicado hablar de experticia en este campo debido a que los cambios se producen en él a un ritmo vertiginoso, sino de profesionales que saben adaptarse a estas, digamos, actualizaciones, y saben aplicarlas y adaptarlas al desarrollo de su labor, enriqueciendo su trabajo mucho más.
Es un asunto muy delicado elegir al profesional en el que vamos a poner nuestra presencia en las Redes Sociales, puesto que es necesario que de veras sepa lo que está haciendo, lo malo es que, la mayoría de las ocasiones, los “pofesionales” ofrecen a las pequeñas empresas mucho mejores condiciones económicas, trabajan más barato, aunque el trabajo no sea adecuado.
Antes de contratar a alguien para gestionar nuestra presencia y reputación online, porque al fín y al cabo son dos aspectos que van de la mano, deberíamos informarnos de anteriores trabajos, formación y conocimientos de quien tenemos delante. ¿Cuántas veces nos hemos encontrado con personas que nos dicen que ellos ya han estado en Redes Sociales y no han obtenido el resultado que la persona que “les vendió la moto” les prometió? Muchísimas.
El problema principal de los malos profesionales es que nos hacen dudar de la capacidad y el trabajo de los buenos. Si hemos intentado implantar en nuestro negocio el Social Media y la persona a la que hemos contratado se ha limitado a abrir dos perfiles, en Facebook y en Twitter, y actualizar una vez al día sin un estudio previo ni conocer bien a su cliente, es lógico que a quien nos contrata le parezcamos unos charlatanes que sólo intentan sacar dinero de todo esto.
Y resulta muy complicado convencerle de que el problema ha sido que no ha habido una estrategia que respalde a las acciones que se han llevado a cabo.
Es difícil hacer frente a esos profesionales que nos prometen miles de followers y fans en un mes, o un retorno de la inversión del 50% en dos días. Es muy complicado convencer a alguien que está desengañado de que el Social Media es efectivo y funciona si se lleva de forma adecuada.
Los malos profesionales están por todas partes, no sólo en Social Media y es difícil competir con ellos, además, pueden afectarnos con su mala praxis.
¿Y tú, qué opinas?
