Son tiempos de convulso interpretar masas, volúmenes de datos para poder crear productos y servicios, cosas para la gente, para nuestros clientes, en definitiva para las personas, que por supuesto, sean útiles de verdad, que valgan para algo fuera de modas pasajeras, nada de cachivaches para amontonarse en el trastero de la oficina o la nave o el hogar. Estamos invadidos, inmersos, saturados...y lo que queda por llegar es....infinito, no se puede cuantificar, esto es solo el principio.
Informaciones, buyers list, opiniones, datos de la competencia sobre clientes actuales-perdidos, inputs, sales-lead, gustos, quejas, reclamaciones, recomendaciones, etc, etc y mil giga etcéteras más de posibilidades.
Por ello, ese caudal de información y desinformación (que también la hay y casi más), o nos organizamos nos preparamos o estamos condenados a vagar por el mundo empresarial lamentándonos de nuestras pocas ventas y nulo conocimiento de lo que nos da de comer: NUESTROS CLIENTES. Si no conocemos esa parte de nuestro negocio, cerraremos muy pronto.
EL CLIENTE, ES, HA SIDO, Y SERÁ EL EJE DE LAS EMPRESAS. Le podemos dar más o menos la complejidad que creamos conveniente, pero sin olvidar el concepto "teoclientista" (todo gira en torno al cliente, es el centro) que debería de prevalecer por encima de otras consideraciones.
Si esa es la situación, es decir recibimos mucho dato y no controlamos nada o muy poco, malo muy malo, aunque siempre hay solución, todo menos la inactividad y quedarnos anclados en las viejas bases de datos.
Para ello algo que esta de moda por el auge del Big Data (pero esa es otra historia para otro día), es el CRM, para l@s legos/as en la materia es el acrónimo de Customer Relationship Management, que viene a ser algo así como la gestión de la relación con los clientes, siendo bastante parco en la definición y en la traducción al español, pero ya se sabe que aquí pasa como con Marketing y Mercadotecnia.
Bien, estamos hablando de acumular la mayor cantidad de datos de nuestros clientes para luego organizarlos tabulándolos y después tranquilamente con un café y Mozart de fondo, analizarlos, estudiarlos, leerlos y releerlos para finalmente sacar conclusiones tales como: que cliente paga bien/mal, que cliente compra más/menos, que zona es más/menos rentable, que producto/servicio se vende mas/menos y donde, quien vende más/menos, quien vende mejor/peor, quien vende más rápido/lento, quien le vende a un sector más o a otro, a que empresas les puedo vender algo que otras parecidas están comprando, etc etc etc, el limite de conclusiones-acciones no existe, depende de la imaginación y ganas del personal "marketiniano", comercial y de gerencia y si están unidos todos fabuloso.
Por supuesto en esto de CRM también hay clases y cacharros que son solo sacacuartos, por ello me gusta el concepto "estamos haciendo" o arewedoing que resulta muy sencillo para pymes, autónomos y quien necesite un software de gestión/plataforma tipo CRM sin complicaciones, sin arruinarse, ademas ya en la nube (el cloud) de Google que todo lo sabe y todo lo ve, y muy pero que muy customizable-adaptable, en fin que por probar ciertas herramientas que nos ayuden a conocer más a nuestros clientes para mimarlos y quererlos más, que no se diga...ellos nos lo agradecerán, y sobre todo nuestra cuenta de resultados.