Opinión Negocios y Empresas

Los consumidores no esperan que sus marcas sean infalibles, pero sí que sean honestas sobre sus errores

El reconocimiento del error consigue que las marcas sean percibidas como humanas
Socio director hamilton retail Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por...

¿Es rentable equivocarse?.Esta pregunta tiene la misma respuesta que la de ¿es rentable que te toque la lotería? En principio ambas son afirmativas pero depende de cuál sea tu reacción ante un hecho o el otro, depende de cómo inviertas y apliques lo obtenido, ya sea el dinero de la lotería o el aprendizaje que resulte del error cometido.

De acuerdo con el político y filósofo Marco Tulio Cicerón cuando dijo que "de humanos es equivocarse pero de locos persistir en el error", en mi opinión lo que verdaderamente resulta rentable no es tanto equivocarse como el reconocimiento del error.

Investigadores canadienses han encontrado algunos indicios que nos invitan a pensar que, a medida que envejecemos, nuestro cerebro aprende mejor de los errores que de los aciertos, que el aprendizaje que se desprende del ensayo-error es mucho más efectivo para la memoria que el aprendizaje sin errores.

Dejar abierta la posibilidad de equivocarse y tener la habilidad para ser capaz de identificar y reconocer el error, proporciona a las empresas una gran oportunidad para el desarrollo de los profesionales que en ellas llevan a cabo su labor, así como para la evolución, el crecimiento y el reconocimiento (reputación) de su marca. El reconocimiento del error consigue que estas marcas sean percibidas como humanas, como marcas empáticas con sus clientes, con sus empleados y con la sociedad con la que conviven.

Para empezar, los consumidores no esperan que sus marcas sean infalibles, que sean siempre perfectas, pero sí que sean honestas sobre sus errores. La naturaleza humana hace que huyamos de esas personas que (aparentemente) no tienen debilidades y que nunca se equivocan. Actitudes que nos generan problemas de conexión, de acercamiento y de confianza hacia ellas. Pues con las marcas nos ocurre exactamente igual.

Por tanto, que una Organización tenga la posibilidad de equivocarse (ya no digo promueva) y haya adquirido y desarrollado la capacidad y la habilidad para reconocer sus errores (ya no digo haya creado los cauces), le permitirá desarrollar a su vez, otra serie de cualidades por las que ser reconocida, entre las que me gustaría destacar:

  • Innovación: no es posible evolucionar y crecer sin admitir la posibilidad de equivocarse, sin reconocer que el camino a seguir no siempre es la línea recta. Una habilidad que lleva implícita la de la valentía de asumir los riesgos que toda empresa alberga y que todo proceso de innovación, forzado o no, lleva consigo. La peor decisión es la que nunca se toma o la que se toma tarde.
  • Flexibilidad: para crear los procesos que permitan amparar la posibilidad del error y entender que sólo desde la libertad para ello surge la confianza y la creatividad para poder evolucionar.
  • Objetividad: para ser capaz de leer la situación que nos ha llevado a equivocarnos en clave de futuro, en sentido positivo y nunca culpabilizando a otros de nuestros errores.
  • Transparencia: es una de las formas de incorporar la honestidad a las características de humanidad y de empatía que se esperan de una Organización y/o de una marca. Transparencia para mostrar el error a través de la comunicación y la rectificación del mismo. En un mundo hiperconectado la transparencia no es una opción, es una obligación. Lo contrario ya sabemos que es un error de consecuencias incalculables.
  • Coherencia: íntimamente relacionado con el punto anterior, la coherencia es la distancia más corta entre lo que soy como marca y como empresa y lo que digo que soy. A una marca/empresa coherente le resultará más sencillo (y más barato) poder enfrentarse a sus posibles equivocaciones.
  • Humildad: no supone reconocer una debilidad sino poseer la sabiduría y la fortaleza para saber rectificar.
  • Y, sobre todo, capacidad de aprendizaje: como decía Oscar Wilde, "experiencia es el nombre que damos a nuestras equivocaciones". La experiencia es lo que soy capaz de hacer con lo que aprendí. La cuestión fundamental estriba en que si como Organización o como marca (o como persona) no voy a tener la humildad de reconocer el error, no podré aprender del pasado y mucho menos ofrecer una respuesta adecuada en el futuro.

Pero lo más importante, más allá de desarrollar estas habilidades, la imagen que proyectará le permitirá adquirir una ventaja competitiva difícil de superar por su competencia, la de la capacidad de atraer y retener un talento que posea y tenga estas mismas cualidades, esta misma actitud. Personas y profesionales creativos, con capacidad de innovación, valientes, honestos, transparentes, coherentes con su comportamiento y su forma de hacer y de pensar, flexibles ante la adversidad y, sobre todo, con la humildad necesaria para poder aprender de sus errores.

Valores de un talento que en muchos casos las empresas, y la sociedad en la que vivimos, parecen desperdiciar al "jubilar" de manera forzosa a profesionales a los que, cumplidos los 50 años, con unas mochilas cargadas de experiencia, de errores y de aciertos, de equivocaciones y de aprendizajes, y probablemente en el mejor momento de su vida profesional, les negamos, y con ello nos negamos, la oportunidad de hacernos más corto (y por tanto más rentable) el camino que ellos ya anduvieron, obligándonos a recorrerlo de nuevo y probablemente a equivocarnos otra vez.

No es rentable cometer, año tras año, generación tras generación, el error de pensar que seremos eternamente jóvenes, carecer de la humildad para reconocer el valor de la experiencia de aquellos que ya hicieron el camino antes que nosotros y de no desarrollar la capacidad de aprender de ellos. El hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra y con él, y en este punto, la sociedad entera.

Si tenemos identificado el error, aprendamos de él y, como decía Cicerón, no seamos tan necios de seguir persistiendo en el mismo.

Socio director hamilton retail Licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por...
Más Leídos
Semanal
Mensual
Anual
Contenidos Patrocinados
ADS
Promocionados