La presencia móvil es un elemento determinante para el futuro de las empresas y sobre todo un aspecto que nadie que establece una efectiva estrategia online debería obviar, especialmente si lo que intenta es llegar a algunos públicos concretos. Para los deseados millennials, que una marca esté o no en dispositivos móviles no es una cuestión baladí: puede determinar sus intenciones de compra. Y si las marcas no quieren perder a los millennials, no tendrán más remedio que esforzarse por estar allí.
Según un estudio de Zogby Analytics para la empresa Mitek, el 36% de los millennials ya ha tomado una decisión de compra o han cambiado la empresa de la que son clientes basándose en la oferta que hacen las compañías en dispositivos móviles. Es decir, la presencia móvil de la firma ha sido el factor determinante para convertirse - o no - en su cliente. Además, el 81% de los encuestados considera que contar con una aplicación móvil es muy importante. La mitad de los jóvenes ya emplean los sites móviles de forma diaria.
"El smartphone es crítico para los millennials", explica Jim Debello, CEO de Mitek, a MobileMarketer. "Las grandes compañías son hoy diferentes a las que lo eran hace 25 años, como es el caso de Facebook, Snapchat y Pinterest. Las empresas deben adoptar nuevas formas de comunicación e interactuación o serán dejadas de lado".
La importancia que los millennials dan a los dispositivos móviles es abrumadora. El 87% mantiene siempre a su lado a su smartphone y para un 80% el móvil es lo primero que mira al levantarse. El uso de estos dispositivos es intensivo, así como su fe en los mismos. El 60% de los entrevistados en la realización del estudio está convencido de que en 5 años todos los procesos de consumo se realizarán usando el móvil. Es decir, para ellos el m-commerce no es ni una tendencia de futuro ni una posibilidad, sino más bien una realidad que se convertirá en canon en poco menos de una década.
No olvidar el m-commerce
La visión del futuro de los millennials choca, sin embargo, con la posición que están adoptando muchas marcas, para las que el comercio electrónico móvil no es todavía prioritario y para quienes está aún en el último apartado de sus listas de tareas pendientes. El 68% de los comerciantes, por ejemplo, no va a realizar ninguna inversión (ni siquiera continuará una anterior) para estar preparado para la próxima campaña de Navidad en m-commerce, como denunciaba un reciente estudio de eBay Enterprise. Sus focos de atención son los gastos en atención al cliente o en marketing, pero no en generar una plataforma de ventas cómoda y eficaz desde tabletas o móviles.
La estadística demuestra el abandono de los comerciantes, aunque otros estudios - y sus respectivas conclusiones - confirma que están cometiendo un error. Los usuarios dedican más tiempo al proceso de compra cuando están en el móvil que cuando están en un ordenador y, además, 1 de cada 3 compras ya se está cerrando desde un smartphone.
En el último trimestre, según datos de Comscore, el m-commerce creció la nada desdeñable cifra de un 47%.
Cómo son los millennials
Y si en el caso del mercado global el m-commerce es importante, en el caso de los millennials lo es todavía más. Los millennials ya están usando, de hecho, los dispositivos móviles hasta durante los procesos de compra off line, lo que demuestra la importancia que le dan a estos terminales. Además son los verdaderos early adopters de herramientas como las de pago por móvil.
Para este grupo de consumidores, las marcas deben ser además tecnológicamente innovadoras y premian con su fidelidad y su interés a aquellas que saben entender hacia dónde van los cambios tech antes que nadie. Quedarse, por tanto, fuera del comercio electrónico móvil no es más que una forma de perder posiblemente para siempre a estos consumidores.
