Por Redacción - 10 Octubre 2025
Durante el pasado martes 8 de octubre, en el interior del espacio Loom Azca, arrancaba la quinta edición de MadBlue Summit con un aire de expectación palpable, propio de los eventos que marcan tendencia. Empresarios, emprendedores, inversores y curiosos de la sostenibilidad se daban cita en un mismo lugar con una idea compartida: el futuro no se imagina, se construye.
Desde el inicio, el encuentro destacó por esa rara capacidad de fusionar la ambición empresarial con el compromiso social y medioambiental, reuniendo en un mismo espacio a algunos gigantes como Google, L’Oréal, LG, Nestlé, Publiespaña, Fundación ONCE o Telefónica. Todos coincidían en una misma idea que marcó el ritmo de la jornada: The Future is Now.
La sesión inaugural, con las palabras de Luis Prieto, CEO de MadBlue, y Cristina Garmendia, presidenta de Mediaset España, puso el tono: optimismo, acción y propósito. Fue Garmendia quien dejó una de las frases más recordadas del día: “La innovación no tiene sentido si no mejora la vida de las personas”, un mensaje que terminó convirtiéndose en el verdadero hilo conductor del evento.
“Hay que crear la belleza que mueve el mundo”: la visión de L’Oréal
Entre los discursos más esperados estaba el de Kim Dirks, CDMO de L’Oréal España y Portugal, quien ofreció una mirada brillante sobre cómo la tecnología está redefiniendo el concepto de belleza, esto no solo significa desarrollar productos eficaces, sino hacerlo respetando el planeta de forma sostenible. En este sentido, Dirks explicó que el 63% de los ingredientes en las formulaciones de la compañía ya proceden de bases biológica o recursos circulares, y que la reducción de emisiones de CO₂ en las plantas de fabricación es un compromiso innegociable. Asimismo, la Inteligencia Artificial también ha supuesto un gran medidor de cambios de para la compañía, pues permite escuchar al consumidor en tiempo real y anticipar tendencias, pero actuando con compromiso social. Su mensaje fue claro: la innovación no solo transforma productos, sino también procesos, relaciones y propósitos.

LG y la sostenibilidad que perdura
Otro de los momentos más aplaudidos lo protagonizó Jaime de Jaraiz Lozano, Presidente y CEO de LG Electronics España, quien recordó que la sostenibilidad también pasa por diseñar productos que duren toda la vida. “El producto más sostenible —dijo— es el que dura más tiempo y produce menos residuo”. Con tono cercano, explicó cómo en LG han convertido la durabilidad en su mejor política ecológica, ofreciendo garantías de por vida en motores de lavadoras, frigoríficos o lavavajillas, una iniciativa que nació en España y que la compañía planea extender a otros países. También habló de la tecnología OLED, “sin bombillas, más ligera y eficiente”, como ejemplo de innovación más respetuosa con el medioambiente. “La innovación debe mejorar la vida de las personas” concluyó. Un mensaje, cargado de la visión humanista detrás de LG, recordando así que cada avance tecnológico debe latir una intención: hacer el mundo más habitable y duradero.
El enfoque cambió de la tecnología a la comunicación con Davide Mondo, CEO de Publiespaña, quien defendió la responsabilidad de los medios de comunicación en la construcción de relatos sostenibles. “Nuestro trabajo es contar historias que importen”, dijo. “No basta con emitir mensajes: deben calar en la sociedad”. Mondo presentó ejemplos concretos, como el proyecto con Vinted, El armario de los presentadores, o las campañas con Ecoembes, todas con un mismo hilo conductor: conectar sostenibilidad y entretenimiento. “La televisión tiene el poder de llegar a todos, y eso nos obliga a hacerlo con propósito”, apuntó. Su intervención recordó que la comunicación también es innovación cuando se pone al servicio del cambio cultural.

Si algo dejó claro MadBlue 2025 es que no hay sostenibilidad sin inclusión. En la mesa protagonizada por la Fundación ONCE, Telefónica y AMETIC la conversación se centró en cómo evitar que la tecnología excluya a quienes más la necesitan. Un claro ejemplo de ello fue cómo ciertos avances, como el nacimiento del iPhone, complicaron el acceso a la tecnología para personas ciegas, y defendieron la necesidad de diseñar soluciones accesibles desde el principio. Presentaron proyectos de robótica asistencial para movilidad en aeropuertos y estaciones, y un sistema de lengua de signos con inteligencia artificial, desarrollado junto a Mediaset. Telefónica, por su parte, subrayó la importancia de investigar, co-crear y experimentar de la mano de las comunidades de usuarios, con asociaciones de testers o aliados como la ONCE, para adaptar y mejorar servicios haciéndolos más accesibles, por ejemplo Movistar +. Mientras tanto, AMETIC, presentó sus programas para detectar brechas tecnológicas y promover la accesibilidad total. En suma, fue una conversación que recordó que la tecnología, si no es inclusiva, no puede llamarse progreso.
El MadBlue Summit 2025 cerró su jornada reafirmando su papel como espacio de diálogo y acción, donde la innovación se mide no solo por su avance técnico, sino por su impacto social y medioambiental. Porque si algo dejó claro esta quinta edición es que la innovación del futuro no pertenece solo a las empresas o a la tecnología, sino a todos los que creen que el progreso, para ser real, debe ser sostenible, inclusivo y humano.












