
Por Redacción - 18 Marzo 2025
El mercado automovilístico español está experimentando un cambio significativo en la preferencia de los consumidores. Durante décadas, marcas europeas como Renault, Peugeot, Seat o Citroën han dominado las ventas en el país, pero en los últimos años, las firmas asiáticas han ido ganando terreno de forma acelerada, impulsadas por una combinación de calidad, tecnología avanzada y precios competitivos.
Las marcas asiáticas avanzan en el ranking de ventas
Desde 2021, el dominio europeo ha empezado a diluirse con la llegada de marcas asiáticas a los primeros puestos de ventas en España. Toyota fue la primera firma no europea en entrar en el podio y, desde entonces, el crecimiento ha sido imparable.
En 2022, tres marcas asiáticas (Toyota, Kia y Hyundai) se situaron entre las más vendidas del país, mientras que en 2023 Toyota y Kia ocuparon los dos primeros puestos del ranking. En 2024, Toyota consolidó su liderazgo por tercer año consecutivo, mientras que Hyundai y Kia se posicionaron en el cuarto y sexto lugar, respectivamente.

Las estadísticas reflejan claramente este cambio de tendencia: aunque las marcas europeas continúan siendo las más vendidas en España, con un 60% de cuota de mercado, su presencia ha disminuido en los últimos años. En 2023, perdieron 1,4 puntos de cuota, mientras que las marcas asiáticas aumentaron su participación en dos puntos porcentuales, alcanzando el 34,4% del mercado.
La irrupción de las marcas chinas en España
El crecimiento de las marcas asiáticas no se limita a los fabricantes japoneses y surcoreanos. En los últimos años, las marcas chinas han desembarcado con fuerza en el mercado español, con un número creciente de compañías que apuestan por modelos eléctricos y híbridos a precios competitivos.
Actualmente, hay 26 fabricantes chinos vendiendo sus vehículos en España, superando con creces a las 11 marcas británicas y a las 8 japonesas. A pesar de que su cuota de mercado sigue siendo modesta (4,89% en 2024), las proyecciones apuntan a un crecimiento acelerado en los próximos años.
MG es la marca china con mayor presencia en el mercado español, con casi 31.000 unidades vendidas el año pasado. Sin embargo, otras firmas como BYD (5.400 unidades), Omoda (7.800 unidades) y Jaecoo (más de 1.000 unidades) están comenzando a consolidarse y a ganar reconocimiento entre los consumidores.

Factores clave del éxito asiático
El éxito de las marcas asiáticas en España se explica por una combinación de calidad, innovación tecnológica y estrategias de mercado bien definidas. Toyota, Hyundai y Kia han elevado significativamente el estándar de sus vehículos, incorporando sistemas avanzados de seguridad y conectividad que han conquistado a los consumidores. Además, la apuesta decidida por la electrificación ha sido clave en su crecimiento, ya que han sabido posicionarse en un segmento en plena expansión con una oferta sólida de modelos eléctricos e híbridos.
Otro factor determinante ha sido la competitividad en los precios. Aunque estas marcas han dejado de basar su estrategia exclusivamente en tarifas asequibles, siguen destacando por una relación calidad-precio difícil de igualar. A esto se suma un cambio en las preferencias del consumidor español, que muestra una mayor predisposición a probar nuevas marcas en comparación con otros mercados europeos, facilitando así la consolidación de los fabricantes asiáticos en el país.
¿Podrán las marcas europeas frenar esta tendencia?
A pesar de la fuerte competencia, las marcas europeas todavía conservan una posición dominante en el mercado español. En 2024, las firmas alemanas lideraron las ventas con 227.580 unidades, aunque su cuota de mercado cayó al 22,38%. De igual forma, las marcas francesas e italianas también vieron reducida su participación. En contraste, marcas de países emergentes como China, República Checa (Skoda) y Rumanía (Dacia) han incrementado su cuota de mercado, al igual que los fabricantes japoneses y suecos.
El futuro del sector en España dependerá de la capacidad de las marcas europeas para adaptarse a la electrificación y a las nuevas demandas de los consumidores. Mientras tanto, las firmas asiáticas continúan acelerando y consolidando su presencia en un mercado que, hasta hace poco, era territorio dominado por los fabricantes europeos.

