Por Redacción - 1 Septiembre 2025
Desde que Nesquik se estableció en el mercado español en 1963, ha sabido evolucionar, no solo en su propuesta de valor, sino también en su narrativa de marca. En este año 2025, la compañía de Nestlé Iberia ha dado un paso audaz al lanzar una de las campañas más significativas de su historia, buscando conectar con las nuevas generaciones a través de un mensaje que resuena con la autenticidad y el optimismo. La elección de Lamine Yamal, un talento precoz del fútbol de solo 18 años, como figura central, no es casualidad; su historia personal y profesional se alinea de manera excepcional con los valores que la marca busca transmitir.
La campaña, bautizada con el lema “No te rayes y sigue jugando”, se presenta como una filosofía de vida. Sugiere que los desafíos y las complicaciones cotidianas, que a menudo parecen tan complejos, pueden ser disueltos con la misma facilidad con la que los gránulos de Nesquik se integran en la leche. Este paralelismo es la columna vertebral del mensaje: una invitación a adoptar una actitud resolutiva y a no dejarse abrumar por los “cacaos” del día a día. Marc Ponsa, responsable de Marketing de Nesquik en Nestlé Iberia, subraya que la campaña es un hito por su capacidad para humanizar la marca y reflejar una mentalidad de superación que es universal, pero que en el caso de Lamine Yamal se manifiesta de manera ejemplar.
La narrativa visual del anuncio muestra a Yamal mientras realiza toques de balón con una lata de Nesquik, inmerso en una profunda reflexión. Su gesto y su actitud transmiten la idea de que, a pesar de las presiones y los desafíos inherentes a su carrera, su esencia permanece intacta: la de un joven que simplemente disfruta jugando al fútbol. Este enfoque destaca no solo los éxitos del jugador en el campo, sino también la forma en que los alcanza: con un espíritu deportivo, una mentalidad ganadora y una inquebrantable positividad. La colaboración entre Nesquik y Lamine Yamal trasciende un simple acuerdo publicitario para convertirse en una declaración de principios sobre cómo enfrentar la vida con pasión y resiliencia. El deporte, y en particular la trayectoria de Yamal, se convierte en el vehículo ideal para llevar este mensaje a los jóvenes, demostrando que la actitud es tan importante como el talento.
Para capitalizar esta colaboración, Nesquik ha lanzado una serie de productos conmemorativos. Una edición limitada de su icónica lata presenta a Lamine Yamal junto a la mascota de la marca, Quicky, convirtiéndola en un objeto de deseo para coleccionistas y seguidores del jugador. Además, los packs de mayor tamaño de Nesquik incluirán una botella shaker personalizada con el nombre del futbolista, incentivando a los consumidores a llevar el espíritu de la campaña más allá del hogar. Estos lanzamientos refuerzan el vínculo emocional con el público y convierten un mensaje publicitario en una experiencia tangible.
La estrategia de la marca va más allá de los formatos tradicionales y busca la relevancia en nuevos escenarios. Por ello, Nesquik se ha convertido en patrocinador oficial de La Capital FC, el equipo de la Kings League que preside el propio Lamine Yamal. Esta incursión en la liga de fútbol 7 fundada por Gerard Piqué demuestra la agilidad de la marca para alinearse con plataformas que capturan el interés de las audiencias jóvenes, reforzando su compromiso con el deporte y con la figura de Yamal en su faceta más personal. La presencia de la campaña en el canal digital y en publicidad exterior, así como en los puntos de venta, asegura una difusión amplia que acompaña el mensaje principal. La sinergia entre la campaña, los productos de edición limitada y la incursión en la Kings League crea un ecosistema de marca coherente y de gran alcance, posicionando a Nesquik no solo como un producto, sino como un estilo de vida que valora la positividad y el disfrute.












