Continua Leyendo...
Hoy en día las empresas deberían aprovechar el poder de la telefonía móvil para crear una relación directa con los clientes y, en última instancia, generar lealtad y fidelidad con el consumidor, sobre todo en el momento de la compra. Una de las formas más eficaces de fidelizar al cliente es incorporar en las operaciones de compra ‘códigos de respuesta rápidos’ (QR).
Todas estas soluciones funcionan como una tarjeta virtual, a la que los clientes pasan cierta cantidad de dinero y consiguen regalos, promociones o descuentos como recompensa. Los códigos QR permiten medir la lealtad mejor que Facebook o el "check in" de Foursquare, ya que los clientes tienen que comprar algo para obtener acceso al código QR. Algunas soluciones imprimen el código en la parte inferior de cada recibo de venta (como RewardLoop o Punchd), o permiten a los clientes escanear un código en el momento del registro (Perx, Belly).
La mayor ventaja para los minoristas es que el código QR puede contener información acerca de la compra: lo que se vendió, fecha, hora, lugar y forma de pago. Con estos datos, las empresas pueden llegar a conocer mejor a sus clientes y adaptar sus estrategias de marketing a los hábitos de compra de los clientes. La configuración es sencilla, mediante la integración con los sistemas de punto de venta a través de un dispositivo adicional o software plug-in.
Es muy sencillo escanear los códigos, lo que también hace que sea fácil para los clientes inscribirse y supone una ventaja remplazar con el móvil la pila de tarjetas y papeles que almacenamos en la cartera (u olvidados en el cajón de la cocina). Solamente hay que escanear un código nuevo cada vez que se realiza una compra, y la información se almacena en la nube.
El pago a través de códigos QR es cada vez más popular. En este sentido, PayPal ha llevado a cabo algunos proyectos piloto interesantes este año en Singapur en las paredes del metro de la ciudad. El proyecto permite a los usuarios del suburbano comprar productos directamente de los anuncios mediante el escaneo de un código QR, introduciendo su información de pago. El código QR captura el lugar y el momento que ha analizado, proporcionando una información muy valiosa para los minoristas, así como una conexión directa a su dispositivo móvil.
Del mismo modo, muchos bancos empiezan a incorporar los códigos QR en su aplicaciones de banca móvil para el pago de facturas y también el pago P2P. La Start-up Paydiant, una aplicación de pago móvil de marca blanca, recibió recientemente 12 millones de dólares de financiación. También los restaurantes, hoteles y bares pueden utilizar sus recibos para imprimir códigos QR, lo que permite a los clientes pagar y salir cuando quieran (la entidad financiera Bank of America está probando ya esta tecnología).
Todavía está por ver si los pagos mediante códigos QR serán la próxima app de moda, pero definitivamente suponen un canal más para permitir los pagos móviles sin NFC. Sin duda van a desempeñar un papel en el futuro de los pagos y el CRM móvil. Después de todo, Starbucks con su tecnología de código de barras 2D ya ha generado más de 40 millones de dólares en transacciones de pago, como se indica al final del primer trimestre de este año.
