Estrategia de marcas en la IA generativa: el dilema entre bloqueo total o reparto de ingresos por uso de la propiedad intelectual
Por Redacción - 6 Octubre 2025
La Inteligencia Artificial generativa ha pasado de ser una novedad tecnológica a un poderoso motor de creación de valor, y con ello, ha atraído la atención regulatoria y la preocupación de las grandes corporaciones dueñas de marcas icónicas. El movimiento de OpenAI al establecer un sistema de permiso explícito y reparto de ingresos con Sora es una jugada maestra de marketing y estrategia legal. Está posicionando a la compañía no solo como líder en innovación, sino también como un socio responsable y ético que respeta y busca compensar a los creadores originales.
Esta aproximación transforma la PI, antes vista como una barrera, en un activo premium al que solo se podrá acceder mediante pago o licencia. Las marcas, desde Disney hasta cualquier otra empresa con un branding potente, obtienen ahora una nueva herramienta de control y monetización. Ya no se trata solo de bloquear la infracción, sino de abrir un nuevo canal de ingresos al permitir que sus personajes e imágenes distintivas sean recreados, siempre bajo sus términos y recibiendo una parte de los beneficios. Esto es un giro decisivo: la protección de marca se convierte en una oportunidad de negocio.
Estrategias de marca ante el modelo de permiso y royalties
El precedente sentado por OpenAI fuerza a todas las marcas a tomar una decisión crucial: ¿bloqueo total o monetización activa?
La postura de Disney de bloqueo completo refleja una estrategia de protección de valor a ultranza. Para una marca cuyo capital simbólico es inmenso y se basa en el control meticuloso de su narrativa, el riesgo de que la IA genere contenido off-brand o de baja calidad que diluya su imagen es inaceptable. Su mensaje de marketing es claro: la integridad de la marca está por encima del ingreso rápido por royalties.
En contraste, muchas marcas de nicho, estudios menos consolidados o creadores individuales podrían ver en el modelo de reparto de ingresos una expansión orgánica de su PI. Al permitir el uso controlado de sus activos en Sora, están abriendo sus personajes a la creatividad de millones de usuarios, generando una visibilidad masiva y, lo más importante, obteniendo una nueva fuente de ingresos pasivos a través de las creaciones de los usuarios. Para estas marcas, la IA generativa se convierte en una plataforma de licencia automatizada.
El futuro de la IA: hacia la licencia universal de contenido
La tendencia que inicia Sora es la de una regulación pactada y mercantilizada. Es previsible que otras plataformas de IA, al enfrentar la misma presión de los lobbies creativos y la necesidad de nutrir sus modelos con datos legítimos y de alta calidad, adopten mecanismos similares. De hecho, el CEO de OpenAI, Sam Altman, ya ha adelantado que el sistema de reparto de ingresos, tras ser perfeccionado en Sora, se extenderá al conjunto de productos más amplio de la compañía.
Esto presagia un futuro donde el acceso a la Propiedad Intelectual de marca en los modelos de IA se gestionará a través de grandes acuerdos de licencia o plataformas de micro-royalties. Las empresas tecnológicas buscan un mecanismo de compensación justo que legitime su entrenamiento y uso de datos, mientras que las marcas buscan la máxima rentabilidad de sus activos intangibles. En este nuevo statu quo, la capacidad de una marca para gestionar, licenciar y monetizar su PI dentro de los ecosistemas de IA será un diferenciador clave en su estrategia de crecimiento y valor de mercado.












