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Si quieres fidelizar a tu cliente, crea un ritual alrededor de tu marca

Las marcas asociadas a rituales o supersticiones, nos dan la ilusión de tranquilidad y pertenencia
Doctorando en marketing. Más de 10 años dirigiendo equipos de...

Los rituales forman parte importante en nuestro día a día. Un ritual es una serie de acciones, realizadas principalmente por su valor simbólico. Son acciones que están basadas en alguna creencia, ya sea por una religión, por una ideología política, un acto deportivo, por las tradiciones, por los recuerdos, la memoria histórica de una comunidad. El término "rito" proviene del latín ritus.

Rito: Se trata de una costumbre o ceremonia que se repite de forma invariable de acuerdo a un conjunto de normas ya establecidas.

Desde la ducha y el café antes de salir de casa, coger la misma ruta para ir a trabajar, o seleccionar un tipo de ropa determinado, según la ocasión, es un rito.

Sin hablar de todos los que hacemos en estas fechas. Que si las uvas de la suerte, el champan, la ropa interior roja, poner el árbol de Navidad…… Seguro que me olvido de algunos.

Mi amigo Jordi, en la época universitaria, se ponía una vieja camiseta interior cuando salíamos de noche los fines de semana. Eso le traía suerte, según él. Hasta que un día su madre se la encontró y la tiro de vieja que estaba.

¿Adivinas? Sigue teniendo el mismo éxito con las mujeres, unos cuantos años después, y sin su camiseta de la suerte.

Los rituales nos ayudan a enfrentarnos al mundo, a salir de nuestra zona de confort, que según para cada persona será más o menos amplia y adentrarnos en la zona de incertidumbre.

Son actos no racionales nacidos de la idea que a través de estos podemos manipular el futuro, aunque no haya una relación causal entre el acto en sí y el resultado.

Mientras más imprevisible se vuelve el mundo o el futuro, más nos obcecamos con la idea de controlarlo, al menos de no perder el control sobre él.

Entonces es cuando adoptamos mayor cantidad de rituales o costumbres que nos hagan sentirnos más seguros, para poder reducir el nivel de ansiedad y continuar hacia adelante.

En 2007, la BBDO Worldwide identificó los 4 rituales más importantes que se producen desde que inicia hasta que termina el día.

El primer ritual es cuando recién nos levantamos y nos preparamos para hacer frente al día. Esto requiere una serie de acciones como tender la cama, vestirse, bañarse, lavarse los dientes, etc.

El segundo tiene que ver con el hecho de compartir la comida con otras personas, desde un desayuno familiar, hasta la reunión social del trabajo para celebrar algún cumpleaños, por ejemplo.

El tercero tiene que ver con las “salidas” después del trabajo, y con una serie de preparaciones que esto conlleva como nuestra apariencia, el traslado al destino, etc.

Y el último tiene que ver con la protección que hacemos de nosotros y de los nuestros antes de ir a dormir, como apagar la luz, programar la alarma, cerrar puertas y ventanas, preparar la ropa para el día siguiente, etc.

¿Cómo pueden usar o usan las marcas los rituales?

Las marcas asociadas a rituales o supersticiones, nos dan la ilusión de tranquilidad y pertenencia.

Los rituales nos ayudan a forjar conexiones emocionales con las marcas y los productos y pueden influir de manera poderosa en lo que compramos y como lo hacemos.

Estos pueden ser estratégicamente diseñados por la marca o bien nacer de manera espontanea por parte del consumidor, como el caso de la cerveza Coronita y el limón.

Fue un camarero (en 1981) quien como resultado de una apuesta, introdujo por primera vez la rodaja de limón en el cuello de la botella para ver si los clientes le imitaban.

Por otro lado, nos ayudan a identificar y diferenciar las marcas unas de otras en un mundo donde cada vez esto es más una tarea imposible y donde reina la homogeneización de los productos.

Las marcas que están presentes en todos estos actos del día a día, tienen mayores probabilidades de supervivencia que las que no lo hacen o solo de manera espontanea.

Por ello, muchas marcas crean sus propios rituales. Como se debe comer una galleta (Oreo), como de fría se debe tomar una cerveza, incluso la importancia de compartir el producto (Donettes), socializando en este caso el consumo de dicho producto.

Incluso el caso de los bombones Ferrero Rocher, que han creado un ritual a partir de la estacionalización del producto. (Ya sabes, que no se venden en verano).

Por poner un ejemplo más, actualmente hay un spot publicitario de varias marcas conjuntamente, donde consumidores defienden estas frente a las marcas blancas, hablando de sus propiedades y los efectos que estas tienen para ellos. No deja de reforzar la idea del hábito y de cómo éste ha generado su confianza y seguridad respecto a estas marcas.

El simple hecho de usar la marca que consideramos adecuada, (recordar que el 53% de los adultos y el 56% de los adolescentes utilizan las marcas que recuerdan de su infancia), nos hace sentirnos más seguros y esto sumado a la sensación de familiaridad con el producto, genera altos niveles de fidelidad hacia la marca en cuestión.

Comprar un determinado producto, es muchas veces, más el resultado de un comportamiento ritual que de una decisión consciente.

Y es que los rituales y supersticiones pueden influir de manera poderosa sobre lo que compramos y el modo de hacerlo.

Y tu ¿cuál es el ritual que realizas después de leer mis post?

Yo los twiteo.

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